La administración del presidente Donald Trump revocó la certificación del Programa de Estudiantes y Visitantes de Intercambio (SEVP) de la Universidad de Harvard, impidiéndole inscribir a estudiantes internacionales. La medida, atribuida a supuestos vínculos de la institución con actividades antiestadounidenses y la falta de acción contra el antisemitismo, afecta a más de 6 mil 800 alumnos extranjeros, que representan aproximadamente el 27% del alumnado de Harvard.
En respuesta, Harvard presentó una demanda alegando que la revocación viola la Constitución y las leyes federales. La jueza federal Allison Burroughs emitió una orden de restricción temporal que bloquea la implementación de la medida mientras se resuelve el litigio.
La decisión de la administración ha sido criticada por su impacto en la educación superior y la economía estadounidense. Según la Asociación Nacional para Educadores Internacionales (NAFSA), los estudiantes internacionales contribuyen con aproximadamente 50 mil millones anuales a la economía de EE. UU. y apoyan más de 4 millones de empleos.
Además, la medida ha generado preocupación entre los estudiantes afectados. Shreya Mishra Reddy, estudiante india de la Escuela de Negocios de Harvard, expresó su incertidumbre sobre su graduación y futuro profesional.
