En el marco de la discusión sobre las reformas electorales en el estado, la diputada Gabriela López Torres, del partido Morena, condicionó su voto a favor de la iniciativa de paridad de género a la incorporación de un candado legal que prohíba la postulación de familiares directos de funcionarios públicos.
La legisladora señaló que, si bien la propuesta actual busca dar cumplimiento a una sentencia de 2021 para garantizar la equidad entre hombres y mujeres en cargos de elección popular, la reforma resulta insuficiente si no se abordan prácticas políticas que, afirmó, perpetúan desigualdad y simulación.
López Torres destacó que su respaldo dependerá estrictamente de que se integre un artículo que impida que parientes hasta el tercer grado, ya sea por consanguinidad o afinidad, puedan postularse, con el fin de erradicar la sucesión de cargos entre familiares.
“Esta iniciativa debe ir acompañada de una cláusula muy importante: que ningún familiar pueda formar parte de estas candidaturas. Si se incluye hasta el tercer grado, ya sea consanguíneo o lineal, y exista esa prohibición, estaríamos hablando de un efectivo ‘no nepotismo’ en nuestro estado”, declaró.
La diputada afirmó que, de añadirse este candado, votaría “irremediablemente a favor”, pues el objetivo es blindar una paridad de género real y evitar que las reformas se utilicen como mecanismo para perpetuar intereses políticos dentro de los mismos círculos familiares.
Durante su posicionamiento, López hizo referencia a la postura de la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, quien ha impulsado medidas para combatir el nepotismo desde el ámbito federal. Aunque reconoció que estos cambios se proyectan hacia 2030 a nivel nacional, llamó a que San Luis Potosí avance de manera anticipada y se convierta en un referente legislativo.
“San Luis Potosí podría poner el ejemplo. En Morena hemos sido muy claros y vamos a comenzar por nosotros: no al nepotismo”, subrayó.
La discusión en el Congreso del Estado continuará en los próximos días, en espera de definir si se incorporará este candado antinepotismo dentro de la reforma de paridad, una medida que podría sentar un precedente en la regulación de candidaturas y en el combate a prácticas de privilegio político en la entidad.
