San Luis Potosí podría enfrentar un ajuste presupuestal de hasta tres mil millones de pesos, situación que, según especialistas, impactaría principalmente en áreas con menor costo político como cultura, deporte, ciencia, tecnología e incluso educación.
De acuerdo con Juan Mario Solís Delgadillo, profesor e investigador de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), los recortes responden a distintos factores: disminución en participaciones federales, baja recaudación de impuestos, redireccionamiento de recursos hacia sectores considerados prioritarios o incremento en el endeudamiento estatal.
El académico subrayó que salud y seguridad pública suelen quedar al margen de estos ajustes, ya que reducir su presupuesto implicaría un costo político alto debido a la naturaleza de las demandas ciudadanas en esos rubros.
Respecto al contexto político, Solís Delgadillo señaló que, aunque las elecciones no son inmediatas, el presupuesto comienza a cuidarse de manera particular ante la proximidad del quinto año de gobierno. Esto responde a que cualquier administración busca mantener condiciones favorables para su continuidad.
En cuanto a posibles alternativas, mencionó que aumentar impuestos podría mitigar el recorte, aunque con un fuerte costo electoral; mientras que recurrir a mayor endeudamiento representaría un riesgo financiero con repercusiones a corto, mediano y largo plazo para la sociedad en general.
Finalmente, recomendó fortalecer la comunicación entre autoridades y academia, ya que esta última puede aportar diagnósticos y análisis que permitan generar soluciones más acertadas a los retos financieros del estado.
