El deceso de Sherkie, uno de los leones más representativos del zoológico del Parque Tangamanga I, generó indignación entre la ciudadanía potosina y abrió nuevas dudas sobre el manejo de la fauna a cargo de la administración del parque.
El felino murió la noche del sábado luego de varias semanas en las que su salud fue deteriorándose de manera visible. Aunque recibía atención veterinaria, trabajadores del Área de Manejo de Fauna (UMA) señalaron que en los días previos mostraba debilidad marcada, situación que mantenía preocupaciones dentro del equipo operativo. Hasta el momento, las autoridades no han dado a conocer la causa específica del fallecimiento.
Tras confirmarse la muerte, comenzaron a circular versiones que apuntan a posibles omisiones en su atención. Algunas denuncias sugieren que las medidas aplicadas para estabilizar al ejemplar fueron insuficientes, lo que reaviva cuestionamientos sobre la supervisión y el trato hacia los animales bajo resguardo del zoológico.
En redes sociales, usuarias y usuarios exigieron explicaciones a la administración encabezada por Joaquín García Martínez, criticando las condiciones en que se mantienen los ejemplares y solicitando mayor transparencia sobre los protocolos de bienestar animal.
Sherkie, que llegó al parque en mayo de 2021 y era uno de los animales de mayor tamaño de la UMA, deja ahora al Parque Tangamanga con solo una pareja de jaguares como los felinos más grandes en exhibición.
