El exdiputado de Morena ve desestimada su apelación y deberá cumplir la pena impuesta tras un proceso que incluyó pruebas contundentes y un fallo definitivo del Poder Judicial de Puebla.
La acusación civil presentada en Nevada detalla dos presuntos ataques sexuales, amenazas y grabaciones no autorizadas; Sharpe lo niega y califica la demanda de intento de extorsión.